No permita que las enfermedades transmitidas por el agua amenacen sus futuras reservas
El aumento del poder de las redes sociales está cambiando la forma en que operan los hoteles y resorts en el Caribe y América Central. Los propietarios y la administración de las propiedades deben ser conscientes de las reseñas en línea y lo que se dice sobre sus establecimientos. Los posibles huéspedes ahora pueden ver lo que otros opinan sobre su resort u hotel con solo tocar un botón.
Tomar en serio la retroalimentación de los huéspedes y adoptar las medidas apropiadas puede ayudar a evitar los efectos adversos de la publicidad negativa. Con el fin de aumentar la probabilidad de obtener recomendaciones positivas, los equipos de gestión proactivos de hoteles y complejos turísticos se esfuerzan continuamente por prevenir la posibilidad de problemas desde el principio.
Los problemas relacionados con la salud son especialmente perjudiciales para la reputación de un establecimiento. Se ha demostrado que información sobre un brote de enfermedades en un hotel o complejo turístico perjudica tanto al negocio como a los valiosos clientes. En Internet, la noticia de un brote de enfermedades en un establecimiento puede propagarse rápidamente. Esto puede manifestarse en forma de quejas en línea por parte de huéspedes que sufrieron gastroenteritis, o blogueros que amplifican un brote de Salmonella o enfermedad del legionario en o cerca de un destino turístico. Estas enfermedades se atribuyen típicamente a alimentos contaminados, agua potable y, en ocasiones, a problemas con los sistemas de climatización.
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